
Bienvenidos a esta Guía de Operación en ISO 27001. Comparte este articulo y síguenos para recibir más guías y cursos.
Para saber más comente a continuación, respondemos todos y cada uno de los comentarios.
¿Te gustaría enterarte de cuando lanzamos descuentos y nuevos cursos?

8.1 Planificación y control operacional
Planificación y Control Operacional en el SGSI
La norma ISO 27001 establece la necesidad de garantizar que las medidas implementadas para la seguridad de la información sean efectivas y estén bajo control. Esto implica no solo identificar riesgos y definir controles adecuados, sino también asegurarse de que se aplican correctamente y pueden ser verificados mediante registros y auditorías.
Evidencia de cumplimiento
Uno de los aspectos clave de la planificación y el control operacional es la capacidad de demostrar que se están tomando las acciones necesarias para lograr los objetivos de seguridad. Para ello, es fundamental mantener registros documentados que evidencien la aplicación de los controles.
Por ejemplo, si un control requiere una revisión mensual, la mejor forma de demostrar su cumplimiento es mediante documentos como:
- Informes de hallazgos y análisis de vulnerabilidades.
- Hojas de aprobación de cambios.
- Registros de auditoría y revisiones de seguridad.
- Actas de reuniones donde se revisan los objetivos y el estado del SGSI.
Estos documentos no solo cumplen con los requisitos de la norma, sino que también facilitan el análisis retrospectivo en caso de incidentes de seguridad, permitiendo investigar causas y mejorar continuamente el sistema.
Gestión del Cambio en Seguridad de la Información
Otro requisito importante de la norma es el control de cambios, ya sean planificados o no. Cada cambio dentro del ámbito de seguridad de la información puede tener implicaciones significativas, por lo que la organización debe ser capaz de:
- Identificar los efectos del cambio en la seguridad de los sistemas.
- Evaluar y mitigar los riesgos asociados al cambio.
- Implementar acciones de control para minimizar impactos negativos.
- Documentar todo el proceso para garantizar trazabilidad y cumplimiento.
La gestión del cambio no solo aplica a modificaciones técnicas, sino también a cambios organizativos, normativos o procedimentales que puedan afectar la seguridad.
Registro y Seguimiento de Cambios
Para cumplir con este requisito, la organización debe mantener un registro actualizado de los siguientes aspectos:
- Procedimientos de cambios controlados: Documentar cómo se gestionan las modificaciones en los sistemas y procesos de seguridad.
- Eventos en seguridad de la información: Registrar cualquier incidente que pueda afectar la integridad, confidencialidad o disponibilidad de la información.
- Auditorías y resultados: Mantener evidencia de evaluaciones internas y externas sobre el estado del SGSI.
- Revisiones del SGSI: Archivar las actas y acuerdos derivados de reuniones donde se analicen los avances y ajustes en la gestión de la seguridad.
Mantener copias de seguridad de estos registros es fundamental para evitar la pérdida de información y garantizar que siempre haya evidencia disponible para auditorías o investigaciones internas.
La planificación y control operacional en el SGSI no solo implica definir estrategias, sino también garantizar que estas se aplican correctamente y pueden ser verificadas. Un sistema bien documentado y con procesos de gestión de cambios estructurados permite a la organización no solo cumplir con la norma ISO 27001, sino también mejorar continuamente su postura de seguridad ante riesgos emergentes.
8.2 Evaluación de riesgos de seguridad de la información
Evaluación de Riesgos de Seguridad de la Información
La norma ISO 27001, en su cláusula 8.2, establece la necesidad de realizar evaluaciones de riesgo de seguridad de la información a intervalos planificados, de acuerdo con los criterios definidos previamente en la planificación del SGSI. No se trata de definir un nuevo proceso, sino simplemente de ejecutar las evaluaciones conforme a lo establecido en la cláusula 6, asegurando que se realicen de forma periódica y cuando sea necesario.
Implementación de la Evaluación de Riesgos
Para cumplir con este requisito, la organización debe:
- Aplicar el proceso de evaluación de riesgos definido en la planificación del SGSI.
- Programar evaluaciones de manera regular o realizar análisis adicionales en caso de cambios significativos en la infraestructura, incidentes de seguridad o nuevas amenazas.
- Documentar todos los hallazgos, manteniendo registros que permitan evaluar la efectividad de las medidas implementadas.

Pasos Clave en la Evaluación de Riesgos
- Identificación de activos de información: Determinar qué activos manejan información y cuáles son sus flujos de salida.
- Clasificación de la información: Asignar niveles de criticidad según el valor del activo, su confidencialidad, integridad y disponibilidad.
- Evaluación del riesgo: Asignar puntuaciones o niveles de riesgo a cada tipo de información, considerando la probabilidad de amenaza y el impacto potencial.
- Definición de controles: Implementar medidas de protección para mitigar los riesgos que superen los niveles de tolerancia establecidos por la organización.

Importancia de la Evaluación de Riesgos
La evaluación de riesgos no solo permite identificar vulnerabilidades, sino que también ayuda a priorizar recursos y esfuerzos, asegurando que la seguridad de la información sea gestionada de manera efectiva. Mantener este proceso documentado es clave para demostrar cumplimiento ante auditorías y mejorar continuamente el SGSI.
En definitiva, la cláusula 8.2 no introduce nuevas exigencias, sino que refuerza la importancia de aplicar y documentar las evaluaciones de riesgo de manera estructurada y consistente dentro del ciclo de gestión de la seguridad de la información.


8.3 Tratamiento de riesgos de seguridad de la información
Tratamiento de Riesgos de Seguridad de la Información
La cláusula 8.3 de la norma ISO 27001 establece que la organización debe implementar el plan de tratamiento de riesgos definido previamente en la cláusula 6 y registrar los resultados mediante indicadores de seguimiento.
Este proceso es crucial, ya que asegura que los controles y medidas de mitigación identificados en la evaluación de riesgos sean aplicados de manera efectiva para minimizar la exposición a amenazas.

Implementación del Plan de Tratamiento de Riesgos
El tratamiento de riesgos siempre sigue a la evaluación de riesgos, permitiendo gestionar de manera sistemática las amenazas identificadas. Para esto, la norma proporciona una guía a través de los controles del Anexo A, los cuales pueden ser seleccionados y aplicados según las necesidades de la organización.
Para documentar este proceso de manera adecuada, es necesario elaborar la Declaración de Aplicabilidad (SOA, Statement of Applicability), donde se especifican los controles aplicados y la justificación de su selección.
Creación y Gestión del Plan de Tratamiento de Riesgos
Después de haber definido los controles a implementar, es necesario establecer un plan de acción detallado que incluya:
- Actividades específicas a realizar para la implementación de los controles.
- Relación entre cada medida de seguridad y el riesgo que busca mitigar.
- Responsables de ejecutar cada acción.
- Indicadores para evaluar el grado de cumplimiento y efectividad de las acciones.
Además, los métodos de medición deben estar alineados con los objetivos estratégicos de la organización para garantizar que las acciones aporten valor real a la gestión de la seguridad.

Métricas para el Seguimiento del Plan
El monitoreo del plan de tratamiento de riesgos debe basarse en métricas realistas y alcanzables. Un error común es definir indicadores demasiado complejos que terminan generando más carga de trabajo que beneficios.
Algunas métricas útiles pueden ser:
- Confidencialidad: Reducir el número de incidentes relacionados con fuga de información.
- Disponibilidad: Mantener un porcentaje óptimo de disponibilidad de los sistemas críticos.
- Integridad: Minimizar errores o alteraciones en la información.
Para asegurar la efectividad del tratamiento de riesgos, la organización debe revisar periódicamente los resultados, ajustar estrategias según sea necesario y mejorar continuamente el proceso.
El tratamiento de riesgos es una fase clave dentro del SGSI, ya que permite convertir el análisis teórico de riesgos en acciones concretas que fortalezcan la seguridad de la información.
Mantener un plan bien documentado, con responsables claros y métricas adecuadas, garantizará que los esfuerzos en seguridad de la información sean efectivos, medibles y sostenibles en el tiempo.

No te detengas, sigue avanzando
Aprende con nuestros más de 100 cursos que tenemos disponibles para vos
¿Te gustaría enterarte de cuando lanzamos descuentos y nuevos cursos?

Sobre la autora
Romina Orlando
Con más de 20 años de experiencia en liderazgo, gestión financiera y empresarial. Brindo Educación y Consultoría a profesionales, bancos y empresas. Puedes seguirme en mis redes:
Compartimos estos recursos para ayudar a la comunidad. COMPARTE y Siéntete libre de agregar más sugerencias en los comentarios a continuación, respondemos todos y cada uno de los comentarios.